Al banquillo por intentar ahorcar a una mujer con la que había mantenido una relación

La Audiencia Provincial de Ciudad Real juzgará el 1 y 2 de marzo a W.J.R.M, acusado de un delito de homicidio y un delito de quebrantamiento de medida cautelar, por intentar ahorcar a una mujer --M.Y.M.F.C-- con la que había mantenido una relación análoga al matrimonio y para el que la Fiscalía pide diez años de prisión.

Según el escrito de acusación del Ministerio Fiscal, recogido por Europa Press, el acusado ya había sido condenado por diversas causas -delito de maltrato habitual, amenazas en el ámbito familiar y delitos contra la seguridad en el tráfico- y se encontraba privado de libertad desde el 11 de agosto de 2015.

Sobre las 4.00 horas del 2 de agosto de 2015, acudió al domicilio de M.Y.M.F.C, situado en La Solana, teniendo pleno conocimiento de una medida de prohibición de comunicación y de aproximación en vigor que le impedía acercarse a menos de 500 metros de esta persona, así como comunicarse con ella.

Según relata la Fiscalía, una vez en la habitación de la víctima, el acusado, portando una cuerda, y con intención de acabar con su vida, súbitamente le propinó varias bofetadas y le pasó la referida cuerda alrededor del cuello con el propósito de estrangularla, al tiempo que llevaba el extremo de la cuerda por el gancho de la lámpara que colgaba del techo del dormitorio con la intención de ahorcar a la víctima.

En dicho momento la lámpara cayó al suelo, perdiendo la perjudicada el conocimiento, y una vez que recobró el sentido, aprovechando una momentánea distracción del acusado, la víctima se arrojó por la ventana, con el fin de salvar su vida. Tras los hechos narrados, el agresor saltó por la misma ventana cayendo sobre la víctima y se dio a la fuga, mientras la víctima, que se encontraba tendida en el suelo, era socorrida por su hermana y su cuñado.

A consecuencia de tales hechos, la perjudicada sufrió un menoscabo físico en el cuello así como dolores en esta zona; hematomas en cara, brazo y antebrazo izquierdo y abdomen; múltiples heridas superficiales en rodillas, fisura del talón derecho y una herida cortante en un dedo del pie.

Tal y como indica el Ministerio Público en su escrito, estos daños han requerido una primera asistencia facultativa, tratamiento médico posterior con sutura con hilo y tratamiento ortopédico, habiendo invertido 60 días en curar, 45 de ellos impeditivos para sus ocupaciones habituales.

Asimismo el fiscal señala que son previsibles secuelas físicas en las zonas del cuerpo mencionadas, así como secuelas psicológicas consistentes en trastorno de estrés postraumático de carácter crónico.

Por todo ello, la Fiscalía pide para el acusado un año de prisión por un delito de quebrantamiento de media cautelar y nueve años de prisión por un delito de homicidio en grado de tentativa, a lo que se une el agravante de parentesco.

Asimismo, se prohíbe al acusado aproximarse al domicilio, lugar de trabajo y a la víctima a menos de 500 metros así como comunicarse con ella por cualquier medio durante quince años. Además, deberá indemnizarla con 11.625 euros por las lesiones físicas y secuelas psicológicas causadas.

El acusado, de nacionalidad ecuatoriana, deberá cumplir dichas penas en centro penitenciario español hasta que acceda al tercer grado o por cualquier causa distinta resultara liberado conforme a la legislación española, en cuyo caso se sustituirá el resto de la pena por la expulsión del territorio español, no pudiendo regresa a territorio español por un periodo de diez años.