Trece cooperantes llevan a cabo labores solidarias en países en vías de desarrollo gracias a la Diputación

La Diputación de Ciudad Real ha invertido 25.200 euros en becar a cooperantes de la provincia que realizarán su labor solidaria dentro del presente ejercicio, con una duración mínima de un mes y máxima de tres, en distintos países del mundo que tienen como denominador común la pobreza y la necesidad de ayuda permanente como consecuencia de la difícil situación que atraviesan de manera endémica. En esta ocasión son 13 los cooperantes que ha becado la institución provincial.

Así lo remarca el presidente de la Corporación, José Manuel Caballero, quien destaca también la vocación de ayuda desinteresada que acreditan los becados. Caballero les ha agradecido su disposición y entrega, ya que sin su participación no sería posible llevar a cabo uno de los programas más solidarios que lleva a cabo la Diputación.

Los cooperantes participarán en proyectos que se ejecutan mayoritariamente en América del Sur, concretamente en Honduras, El Salvador y México, aunque también se trasladarán a Togo, concretamente a los pueblos de Baga y Samaragou, así como a Lomé.

La cuantía de la beca está en proporción con los gastos reales, por lo que se han fijado 1.500 euros como importe máximo para hacer frente al viaje, visado y la póliza de accidentes y enfermedad, cantidad que se sumará a una ayuda mensual que garantice la manutención y pago del alojamiento, que no excederá en ningún caso los 450 euros mensuales.

La Diputación ha establecido que el abono de la beca se haga de forma fraccionada, realizando un primer pago del 50 por ciento del importe de forma anticipada, una vez resuelta favorablemente la convocatoria, y el 50 por ciento restante se abonará cuando se justifique totalmente la beca concedida.

La selección de los cooperantes se ha llevado a cabo teniendo en cuenta una serie de criterios, como son la pertenencia a Organizaciones No Gubernamentales (ONG); que trabajen en el ámbito de la Cooperación Internacional al Desarrollo u otras de finalidad social en su caso; la acreditación documental de formación específica o aptitud en cooperación internacional, cursillos de especialización, seminarios, etc.; trayectoria social incluida en el currículum vitae que indique las labores voluntarias de carácter social o las voluntarias remuneradas en relación con programas de cooperación; y la vinculación activa con organismos nacionales o internacionales de actividades de cooperación al desarrollo.