Amancio Prada, en la Catedral de Toledo

Los seguidores de Amancio Prada no son solamente amantes de la música, porque Amancio Prada es mucho más que música. Es poesía, pintura y escultura de voz. Es hacer con la garganta lo que otros hacen con pinceles, cinceles o plumas.

No se escucha solo música cuando uno va a ver a Amancio Prada, es el entorno, el terciopelo de su garganta, el poema cantado, la historia de otros tiempos con el mismo sentimiento de amor que se puede tener hoy. Es entender a San Juan de la Cruz, a Fray Luis de León, o a Rosalía de Castro. Es poner cuerpo y sonido a las palabras un día escritas sobre un papel, para que salgan a pasear por las calles y los mundos, los parques, los bosques, las plazas y por qué no las catedrales.

Esta tarde las notas de su cántico espiritual de San Juan de la Cruz, sonarán en la Catedral de Toledo adornadas con frisos, vidrieras, piedras y cuadros, para sentirlo mucho más allá de los oídos; en el corazón, en el ánima, en el ser mismo de quien sabe comprender tan suprema calidad de música, poesía, y voz.

Es seguro que la actuación de Amancio Prada a las 20.30 en la Catedral de Toledo llevará a otra dimensión a todos aquellos que sepan abrir bien los oídos, el corazón, la mente y los recuerdos de la historia de otros tiempos, para concentrarlos en una preciosa tarde del mes de noviembre en Toledo.

Paloma Moratilla