Unidad en la defensa del tren convencional

Una nutrida representación de políticos, empresarios y sindicatos, entre los que se encuentra la consejera de Fomento de Castilla-La Mancha, Agustina García Élez, y el alcalde de Talavera de la Reina (Toledo), Jaime Ramos, se han subido al tren junto a los representantes extremeños para participar en la manifestación del 18-N en Madrid que reivindica mejoras e inversiones para la línea Extremadura-Madrid.

En declaraciones a los medios este sábado en la estación del tren de Talavera, la consejera de Fomento ha mostrado su apoyo a la concentración de Extremadura para luchar "de manera conjunta" entre ambas administraciones para que el Ministerio de Fomento se comprometa con una "inversión real" en infraestructuras en la línea.

García Élez ha puesto de manifiesto su preocupación por la situación del tren convencional ya que en los últimos años, según ha señalado, está teniendo "un retroceso" importante en cuanto al tiempo del trayecto, la seguridad en la propia vía y "sin saber si los trenes van a llegar a su destino".

De hecho, la consejera ha asegurado que desde el Gobierno regional se ha comunicado varias veces al ministro de Fomento, Íñigo Gómez de la Serna, la necesidad de inversión en la línea convencional que "vertebre y cohesione" la zona de Talavera.

"Necesitamos que las infraestructuras de Castilla-La Mancha estén a la altura para que las empresas sean competitivas y para garantizar la seguridad de los usuarios", ha dicho la consejera, a lo que ha añadido que es necesario que el ministerio escuche estas peticiones.

FIRMA DEL PACTO EN EL TREN

El alcalde, Jaime Ramos, ha firmado el Pacto Social por el Ferrocarril en la provincia de Toledo en el tren con el presidente de Fedeto, Ángel Nicolás, con el secretario general de CCOO de Toledo, José Luis Arroyo, con Alberto Sánchez, responsable de UGT, y con la portavoz del grupo municipal del PP, María Rodríguez y del grupo municipal PSOE, José Gutiérrez.

Ramos ha declarado que con esta firma se ha materializado lo que se acordó en el Pleno del Ayuntamiento de Talavera, y que supone la "unidad de acción" de los grupos municipales sobre el contenido del Pacto por el Ferrocarril de Toledo, y uno de los puntos del Pacto de Extremadura referido a la electrificación de la línea, así como la prioridad para la Plataforma logística de Talavera.

"Es algo que está absolutamente justificado", ha precisado Ramos, quien además ha explicado que ha tenido que enviar varias cartas al ministro de Fomento pidiéndole soluciones a una situación "insostenible".

NO TODO ES AVE

Por su parte, la vicepresidenta primera de las Cortes de Castilla-La Mancha y diputada del grupo parlamentario de Podemos, María Díaz, ha apuntado que la provincia de Toledo merece un tren "digno" que genere riqueza y que favorezca la vertebración de la región con un tren que "no sea solamente el AVE".

Para Díaz, la situación del tren convencional es una "asignatura pendiente" por parte de los diferentes gobiernos a pesar de las reivindicaciones de la ciudadanía y de los distintos colectivos.

También el presidente de la Federación Empresarial Toledana (Fedeto), Ángel Nicolás, ha coincidido en destacar que el tren convencional es el "eje fundamental para la vertebración y cohesión de los territorios", lo cual, a su juicio, tampoco supone "renegar" de la alta velocidad, pero debe "mantenerse una línea que viene siendo deficitaria de un servicio que ha registrado 71 incidencias en los últimos meses".

"Estas incidencias son reflejo de la calidad de la vía y del servicio que se está utilizando y no se puede ser que tardemos media hora más en llegar a Talavera que en el año 2003", ha indicado.

Por último, desde UGT, Alberto Sánchez, ha hecho un llamamiento para que se apueste "definitivamente" por recuperar todo el sistema ferroviario de la comarca de Talavera, con la apertura además de las estaciones cerradas.

A este respecto, el secretario general de CCOO en Toledo, José Luis Arroyo, ha criticado la "política de recortes" del Gobierno central en algunas líneas como la que une Extremadura, Castilla-La Mancha y Madrid, y ha defendido que estas reivindicaciones estén "sobre la mesa" cuando se debatan los presupuestos generales.