El barranco de las oportunidades perdidas

Al comienzo del pasado verano compartí con un amigo una caminata por los puentes y barrancos alrededor de la nueva Vía del Barranco de Santos, en Santa Cruz de Tenerife. Suelo caminar por toda esa zona con frecuencia, desde su arranque en el Barrio de La Salud hasta su final en el puerto. A lo largo de sus 2,7 kilómetros puedo ver la ciudad desde un punto de vista muy distinto, más abajo, más tranquilo, pegado al verdadero suelo. Aquel día empezamos por el puente que pasa cerca del centro psiquiátrico Febles Campos, con una amplia vista del Barranco de Santos, justo cuando acaba la ciudad y comienzan los valles agrestes de Anaga.

Mi acompañante de aquella ocasión era un experto en gestión de la Cultura (con mayúsculas), viejo amigo que acababa de volver a su Isla desde la península, gracias a su nuevo trabajo como responsable del organismo que gestiona la actividad cultural en la ciudad. Aproveché la ocasión para llenarle la cabeza de mis fantasías sobre un festival musical en ese entorno de puentes y barrancos. "Podría llamarse Música bajo el puente", le decía, "el festival low cost de Tenerife". Nos reímos, pero él se lo tomó en serio y se quedó pensando sobre el tema.

Hoy he vuelto a pasar por ese mismo puente, pero ha perdido sus vistas. En sus barandillas han fijado planchas de metal de 2 metros de altura, dicen que para evitar los suicidios. Cuando era un pibe, un conocido de la familia se tiró por la ventana de su casa y se mató. Mi padre me dijo "eso puede pasarte cuando piensas demasiado las cosas". Mi madre movió la cabeza negando, y dijo "un suicidio es siempre una oportunidad perdida".

En fin, que el barranco ya no se ve desde allí, y a mi amigo de aquel día de verano le han quitado sus expectativas de organizar un festival musical bajo el puente, de hecho, le han quitado también su trabajo. A lo mejor es que pensaba demasiado las cosas. Será otra de tantas oportunidades perdidas. Perdidas entre los celos cainitas de nuestra gente y el viento que corre por los barrancos de la ciudad.

Les dejo con un tema musical para levantar el ánimo, es lo que escuchaba hoy en los cascos mientras iba por los puentes y barrancos. Se llama "Feel Good" y es de Louis La Roche, uno de esos músicos franceses herederos de la mejor tradición tecno-funky que hizo famosos a Modjo y su mítico tema "Lady".

Manuel Ortega