La oposición al Gobierno crea extraños aliados

El pleno del Congreso de los Diputados sobre la prórroga del Estado de Alarma ha dejado de manifiesto que el PP está a un paso de dinamitar la Comisión Parlamentaria para la reconstrucción de nuestra economía, y ello antes de su creación, y que las intervenciones de los portavoces de ERC y EH-Bildu expresan mayor sentido de Estado que las de PP y VOX.

Pedía el Gobierno al Congreso de los Diputados autorización para una nueva prórroga del Estado de Alarma hasta el próximo 10 de mayo. Prórroga aprobada a tenor de lo expresado por los portavoces de los distintos grupos parlamentarios. Todos, con la excepción no sorprendente de VOX, JxCat y la CUP -curiosamente, los partidos más equidistantes en su modelo de país coinciden últimamente en el voto contra las propuestas del Gobierno-, han dado su apoyo a la solicitud, aunque algunos han visibilizado, PP y VOX, que la distancia que los separa del Gobierno es insalvable.

Casado ha preparado la hoguera y Abascal ha arrimado la antorcha. El discurso incendiario de ambos pasará a los anales de la historia por coincidir en el tiempo con una de las situaciones más graves que atraviesa nuestro país y que en los países de nuestro entorno se ha resuelto con el cierre de filas entre Gobierno y oposición.

Previamente, Pedro Sánchez ha informado de las posiciones españolas ante la Unión Europea en los plenos de febrero y marzo y ha pedido apoyo para la propuesta que España defiende para la salida coordinada de la crisis económica generada por la pandemia. Ni siquiera aquí ha tenido el apoyo de VOX, que ha pasado página sobre este asunto y se ha centrado en acusar al gobierno de ser responsable de los muertos y de limitar la libertad de expresión con el concurso de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado. Todo ello con un lenguaje chusco y tabernario que nos hace añorar mejores tiempos del ejercicio parlamentario.

El pleno finalizaba con la habitual sesión de control al Gobierno de los miércoles. En ella, el tono ultramontano de PP y VOX ha crecido y mientras los primeros elegían como víctima al Ministro de Sanidad, los segundos ponían la diana en Pablo Iglesias, al que, como es habitual, han preguntado por Venezuela o han utilizado como ariete para cuestionar a otros ministros. La respuesta de los ministros cuestionados ha sido unánime: tender la mano al PP para que participe del diálogo y el acuerdo sobre la salida de la grave crisis económica que está generando la pandemia.

En resumen: tendremos que seguir confinados hasta el próximo 10 de mayo, la desescalada será lenta y posiblemente asimétrica, el sentido del voto del PP nada tiene que ver con su discurso contra el Gobierno, VOX está tan fuera de la realidad que sigue anclado en el siglo XX, Aitor Esteban y Gabriel Rufián siempre llaman la atención con sus intervenciones, la crisis del Covid-19 ha sido el mejor pegamento para el Gobierno de Coalición.

Plumaroja