Día por la despenalización del aborto

Desde el colectivo Comando Violeta queremos recordar hoy, día 28 de septiembre que es el Día de Acción Global por un Aborto Legal, Seguro y Gratuito. Además recordamos que hace solo 6 años, en 2014 estuvo cerca de aprobarse la conocida como ley Gallardón que habría supuesto una pérdida de derechos de las mujeres (https://elpais.com/politica/2014/09/24/actualidad/1411510577_143104.html). Esto dio lugar a grandes movilizaciones en distintas ciudades y también en Cuenca, donde además desde Comando Violeta publicamos el siguiente cartel:

Hoy es un día importante para recordar que seguimos queriendo un aborto legal, seguro y gratuito para que nadie obligue a nadie a abortar ni que nadie obligue a nadie a ser madre y que el aborto deje de estar estigmatizado y pase a ser una opción para quien así lo desee. Porque además se ha demostrado que esto NO aumenta el número de abortos que tienen lugar sino que por el contrario los reduce (https://www.thelancet.com/journals/lancet/article/PIIS0140-6736%2816%2930380-4/).

Igualmente animamos a la ciudadanía a pensar un poco más allá acerca de las implicaciones de un aborto, de un no-aborto, de la crianza de una criatura deseada y de la crianza de una criatura que no se ha querido tener. Queremos poner el foco en sitios hasta ahora poco debatidos, como las ayudas sociales que tiene una madre adolescente cuyo compañero de sexo nunca se hizo cargo de las consecuencias, las ayudas sociales de una madre sola que deseó ser madre sola desde el primer momento pero que lucha cada día por conseguir recursos y realizar tareas típicamente compartidas por dos personas. También sobre las complicaciones que tienen dos mujeres que son pareja y quieren ser madres con reproducción asistida en el sistema público nacional. Son realidades muy complejas de las que hay que comenzar a hablar e igualar a la familia heterosexual que seguimos viendo como estándar cuando cada vez las realidades son más diversas.

También queremos poner el foco en los hombres, en los que se hacen cargo de su semen y se preocupan a posteriori por la salud y un posible embarazo de quien fue su compañera de sexo. Y criticamos profundamente a aquellos que no volvieron a preguntar si hubieron o no hubieron implicaciones para ella, más allá del sexo compartido. Creemos en la igualdad, dentro de lo biológico, en la equidad. El cuestionamiento sobre el aborto nunca pone en la balanza el comportamiento de los hombres (personas con pene) que no cuidan a posteriori sus relaciones sexuales con mujeres, cerciorándose de si esa relación sexual dio lugar a un embarazo y haciéndose cargo de cuidar a una persona que vive en su cuerpo las consecuencias de lo que ambos hicieron y a la posible criatura. También consideramos “hombres que abortan” a todos aquellos que no se hacen cargo de sus criaturas o no lo suficiente como para que la criatura sobreviva sin los cuidados de otras personas o a los maridos que frivolizaron con el aborto de su mujer o con el embarazo de la misma. 

Frente a la figura de la malamadre queremos resaltar la figura del malpadre si este se desentiende del mismo modo que una “malamadre”. Similarmente, queremos que junto al aborto de una mujer, se empiece a pensar alrededor del “aborto de un hombre” no de manera literal sino por comparación con el hombre que no se hace cargo en absoluto o incluso del hombre que ni siquiera se preocupó de saber si con su semen hubo un embarazo. Creemos que no son mayoría pero queremos poner el foco en que existen y no se pone sobre ellos la crítica que se pone en un aborto o en un embarazo no buscado en una mujer. Mientras este debate no esté sobre la mesa, el aborto nunca será abordado de manera integral y justa.

Como dicen en el siguiente artículo (https://idesa.org/la-legalizacion-reduce-los-abortos/) “entre los años 2010 y 2014, el 73% de las mujeres que abortaron fueron mujeres casadas o en unión conyugal mientras que sólo el 27% fueron mujeres que no vivían en pareja. Esto refuerza la noción de que la legalización del aborto no promueve el libertinaje sino que opera como último recurso en la planificación familiar.” 

Y continúan: “El aborto es una experiencia muy traumática que difícilmente alguna mujer la considere trivial ni mucho menos que la disfrute. Pero ser obligada a procrear sin desear tener hijos puede generar, en algunos casos, una situación más traumática aún. Solo de esa manera se explica que en los países donde el aborto es ilegal muchas mujeres estén dispuestas a poner en riesgo su vida en intervenciones clandestinas con tal de interrumpir el embarazo. Las evidencias están mostrando que es poco probable que una mujer llegue a un embarazo no deseado porque el aborto sea legal y, además, que la legalización ayuda a que sean más eficaces las políticas orientadas a promover prácticas sexuales responsables y a darle contención y orientación a quienes enfrentan un embarazo no buscado.”

Centrándonos en Cuenca, queremos destacar el dinero que Adevida recibe del Ayuntamiento -10.000 euros- y de la Diputación 7.000 euros anuales, en actividades que desconocemos o que están directamente relacionadas con ir contra el aborto. Estas subvenciones son del orden de 5 veces superior al dinero que recibe de la misma institución el Centro de la Mujer. Mientras la aportación que el Centro de la Mujer venía percibiendo del Ayuntamiento en años anteriores, de 2.000 euros este año la partida se reduce a 0 euros anuales. 

Nuestro derecho a decidir se hace efectivo cuando tenemos posibilidades y medios reales de poner en práctica la toma de decisión, teniendo el respeto de la sociedad. Hablar de aborto libre significa que NADIE (familiares, pareja, personal sanitario, jueces…), ni NADA (situación económica, administrativa, edad, nacionalidad…) puede limitar la decisión de la mujer sobre lo que sucede en su cuerpo, tener respeto total al motivo que tengamos para interrumpir el embarazo no deseado.

Por todo esto nos declaramos pro-todas-las-vidas. Y que tenga descendencia quien quiera, sólo quien quiera. Por tanto, Aborto legal, seguro y gratuito.

Desde el colectivo Comando Violeta queremos recordar hoy, día 28 de septiembre que es el Día de Acción Global por un Aborto Legal, Seguro y Gratuito. Además recordamos que hace solo 6 años, en 2014 estuvo cerca de aprobarse la conocida como ley Gallardón que habría supuesto una pérdida de derechos de las mujeres (https://elpais.com/politica/2014/09/24/actualidad/1411510577_143104.html). Esto dio lugar a grandes movilizaciones en distintas ciudades y también en Cuenca, donde además desde Comando Violeta publicamos el siguiente cartel:

Hoy es un día importante para recordar que seguimos queriendo un aborto legal, seguro y gratuito para que nadie obligue a nadie a abortar ni que nadie obligue a nadie a ser madre y que el aborto deje de estar estigmatizado y pase a ser una opción para quien así lo desee. Porque además se ha demostrado que esto NO aumenta el número de abortos que tienen lugar sino que por el contrario los reduce (https://www.thelancet.com/journals/lancet/article/PIIS0140-6736%2816%2930380-4/).

Igualmente animamos a la ciudadanía a pensar un poco más allá acerca de las implicaciones de un aborto, de un no-aborto, de la crianza de una criatura deseada y de la crianza de una criatura que no se ha querido tener. Queremos poner el foco en sitios hasta ahora poco debatidos, como las ayudas sociales que tiene una madre adolescente cuyo compañero de sexo nunca se hizo cargo de las consecuencias, las ayudas sociales de una madre sola que deseó ser madre sola desde el primer momento pero que lucha cada día por conseguir recursos y realizar tareas típicamente compartidas por dos personas. También sobre las complicaciones que tienen dos mujeres que son pareja y quieren ser madres con reproducción asistida en el sistema público nacional. Son realidades muy complejas de las que hay que comenzar a hablar e igualar a la familia heterosexual que seguimos viendo como estándar cuando cada vez las realidades son más diversas.

También queremos poner el foco en los hombres, en los que se hacen cargo de su semen y se preocupan a posteriori por la salud y un posible embarazo de quien fue su compañera de sexo. Y criticamos profundamente a aquellos que no volvieron a preguntar si hubieron o no hubieron implicaciones para ella, más allá del sexo compartido. Creemos en la igualdad, dentro de lo biológico, en la equidad. El cuestionamiento sobre el aborto nunca pone en la balanza el comportamiento de los hombres (personas con pene) que no cuidan a posteriori sus relaciones sexuales con mujeres, cerciorándose de si esa relación sexual dio lugar a un embarazo y haciéndose cargo de cuidar a una persona que vive en su cuerpo las consecuencias de lo que ambos hicieron y a la posible criatura. También consideramos “hombres que abortan” a todos aquellos que no se hacen cargo de sus criaturas o no lo suficiente como para que la criatura sobreviva sin los cuidados de otras personas o a los maridos que frivolizaron con el aborto de su mujer o con el embarazo de la misma. 

Frente a la figura de la malamadre queremos resaltar la figura del malpadre si este se desentiende del mismo modo que una “malamadre”. Similarmente, queremos que junto al aborto de una mujer, se empiece a pensar alrededor del “aborto de un hombre” no de manera literal sino por comparación con el hombre que no se hace cargo en absoluto o incluso del hombre que ni siquiera se preocupó de saber si con su semen hubo un embarazo. Creemos que no son mayoría pero queremos poner el foco en que existen y no se pone sobre ellos la crítica que se pone en un aborto o en un embarazo no buscado en una mujer. Mientras este debate no esté sobre la mesa, el aborto nunca será abordado de manera integral y justa.

Como dicen en el siguiente artículo (https://idesa.org/la-legalizacion-reduce-los-abortos/) “entre los años 2010 y 2014, el 73% de las mujeres que abortaron fueron mujeres casadas o en unión conyugal mientras que sólo el 27% fueron mujeres que no vivían en pareja. Esto refuerza la noción de que la legalización del aborto no promueve el libertinaje sino que opera como último recurso en la planificación familiar.” 

Y continúan: “El aborto es una experiencia muy traumática que difícilmente alguna mujer la considere trivial ni mucho menos que la disfrute. Pero ser obligada a procrear sin desear tener hijos puede generar, en algunos casos, una situación más traumática aún. Solo de esa manera se explica que en los países donde el aborto es ilegal muchas mujeres estén dispuestas a poner en riesgo su vida en intervenciones clandestinas con tal de interrumpir el embarazo. Las evidencias están mostrando que es poco probable que una mujer llegue a un embarazo no deseado porque el aborto sea legal y, además, que la legalización ayuda a que sean más eficaces las políticas orientadas a promover prácticas sexuales responsables y a darle contención y orientación a quienes enfrentan un embarazo no buscado.”

Centrándonos en Cuenca, queremos destacar el dinero que Adevida recibe del Ayuntamiento -10.000 euros- y de la Diputación 7.000 euros anuales, en actividades que desconocemos o que están directamente relacionadas con ir contra el aborto. Estas subvenciones son del orden de 5 veces superior al dinero que recibe de la misma institución el Centro de la Mujer. Mientras la aportación que el Centro de la Mujer venía percibiendo del Ayuntamiento en años anteriores, de 2.000 euros este año la partida se reduce a 0 euros anuales. 

Nuestro derecho a decidir se hace efectivo cuando tenemos posibilidades y medios reales de poner en práctica la toma de decisión, teniendo el respeto de la sociedad. Hablar de aborto libre significa que NADIE (familiares, pareja, personal sanitario, jueces…), ni NADA (situación económica, administrativa, edad, nacionalidad…) puede limitar la decisión de la mujer sobre lo que sucede en su cuerpo, tener respeto total al motivo que tengamos para interrumpir el embarazo no deseado.

Por todo esto nos declaramos pro-todas-las-vidas. Y que tenga descendencia quien quiera, sólo quien quiera. Por tanto, Aborto legal, seguro y gratuito.

Colectivo feminista de Cuenca 'Comando Violeta'