¿Por qué se ratifica a Francisco Núñez y se pone en la cuerda floja a los presidentes provinciales del PP?

Hay situaciones en la política que nos llevan a adentrarnos en el mundo de la sociología. Las diferentes formas de afrontar los problemas de las formaciones políticas o los diferentes argumentos utilizados para defender algo que es indefendible.

Estos días hemos sabido que el PP tiene la intención de ordenar sus ejecutivas provinciales en Castilla-La Mancha con sus líderes a la cabeza, aunque mantiene la figura regional en Francisco Núñez. Algo que cuando menos da que pensar sobre cómo lo están haciendo los populares en la región para tomar una decisión tan drástica, ya que en otras comunidades se van a cambiar “algunos” líderes provinciales, pero en CLM son “todos” sus líderes los que están en la cuerda floja, salvo el regional, a pesar de que la línea señalada en sus argumentaciones son idénticas y todas ellas las marcadas por el propio Pablo Casado.  

Todos ellos, incluido el presidente regional, mostraron su respaldo a Cospedal en los días de guerra con Santamaría, y también en las batallas contra el propio Casado, incluso el propio presidente regional fue puesto en ese lugar por la mano recortadora de la ex presidenta. Luego ocurrió eso que tanto les gusta a los políticos “se cierran filas” y aquí no ha pasado nada. Claro que eso es algo de cara al escaparate, porque cuando se barre dentro, se lían buenas polvaredas que la ciudadanía al final acaba respirando.

Cinco fichas del tablero de ajedrez del PP que ya han hecho su trabajo, a juicio de la ejecutiva nacional, no el esperable si se confirman los cambios. Cinco miembros del PP que se colocan ahora en una dimensión diferente a la de su presidente, que no es cuestionado. Cinco peones que pueden llevarnos a reflexionar sobre dos conceptos sociológicos interesantes en el mundo de la política: El Principio de Peter y el Efecto Dunning-Kruger.

El primero es el conocido como el principio de Jerarquilogía que habla de que las personas que realizan bien su trabajo son promocionados a puestos de mayor responsabilidad, hasta el punto en el que llega a un puesto en el que no pueden siquiera formular sus objetivos de trabajo y entonces alcanzan su máximo nivel de incompetencia.

El segundo es el que se podría referir a quien se haya dado cuenta del primero, o al menos piense que así ha sido y sufra el Efecto Dunning-Kruger, que es ese sesgo cognitivo en el que los individuos con escasa habilidad o conocimientos sufren un sentimiento de superioridad ilusorio considerándose más inteligente que otras personas más preparadas y por tanto capaces de buscar solución a los problemas que supuestamente representan, por lo que es mejor “ordenar”. Este solo tiene una explicación y es la incapacidad cognitiva del sujeto para reconocer su propia ineptitud.

Analizar el recorrido y los perfiles de los supuestamente cuestionados o ratificados tampoco nos sacará de la duda.

Vicente Aroca, presidente del PP en Albacete, que quedó fuera del Senado en 2019, se convirtió a cambio en diputado de las Cortes regionales, tras perder la alcaldía de La Roda.

Francisco Cañizares, presidente del PP en Ciudad Real, hizo el recorrido inverso al de Aroca ya que dejó de ser diputado regional para ser senador, pero también perdió la alcaldía de Ciudad Real. Eso sí en su día dio su apoyo “personal” a la ex presidenta de CLM.

Benjamín Prieto, presidente del PP en Cuenca, al que le pierde la boca como al pez, que se le escapó lo de “rojos, falsos y sinvergüenzas” en Fitur, y además luego se ratificó en sus palabras.

El alcalde de Fuentelespino de Haro, dejó de ser presidente de la Diputación de Cuenca para ser diputado regional.

José Julián Gregorio, presidente del PP de Toledo, pasó de ser concejal en el Ayuntamiento de Talavera de la Reina a ser nombrado, por el Consejo de Ministros de Rajoy, delegado del Gobierno en CLM. Cargo que utilizó para insultar reiteradamente a García-Page, en alguna que otra rueda de prensa dada desde las Cortes Regionales; probablemente para hacer méritos frente a su amiga personal María Dolores de Cospedal.

Ana Guarinos, presidenta del PP en Guadalajara, tiene una larga trayectoria. Hubo incluso quien la consideró la heredera “natural” de Cospedal, a pesar de haber sido condenada por vulnerar derechos fundamentales cuando era presidenta de la Diputación de Guadalajara y antes de sorprender el partido con la designación del actual presidente del PP en CLM, Francisco Núñez.

Guarinos no tiene precio como miembro de la oposición, como cuando pidió un profesor de lenguaje de signos, a tiempo parcial, para un colegio de Guadalajara, cuando el puesto llevaba meses desempeñándose a tiempo completo. ¿Desinformada? No puede ser en el PP que hablan con “todos” los colectivos sociales.

La diputada por Guadalajara era la responsable de llegar a un “posible pacto para la recuperación en CLM” en el que según el comunicado del PP se requerían tres condiciones: La primera que las propuestas fueran dotadas económicamente, como así ha sido. La segunda que se diera participación a la sociedad civil, como así ha sido. Y la tercera que se creara una comisión a veces llamada de investigación y a veces de estudio, como así ha sido ¿Por qué no ha firmado ese pacto el PP? Pues habría que preguntárselo a Ana Guarinos.

Sin duda alguna son siete personajes del mundo de la política que nos invitan a reflexionar, sobre el principio de Peter y sobre el efecto Dunning-Kruger.

P. Moratilla