Unidas Podemos IU pide vacunar al personal de servicio a domicilio y de las viviendas tuteladas

Todo el personal del servicio de ayuda a domicilio (SAD) de la Diputación Provincial de Albacete, dependiente del Consorcio de Servicios Sociales, y el que asiste a las viviendas tuteladas de los distintos municipios de la provincia debe ser vacunado en la actual fase.

Unidas Podemos Izquierda Unida considera imprescindible que estas trabajadoras y trabajadores, que en algunos casos atienden a grandes dependientes, sean inmunizados contra el Covid-19 y entren en el grupo de prioridad del programa de vacunación que corresponda en atención al servicio público que desempeñan.

La Consejería de Sanidad, que dirige Jesús Fernández, debe rectificar e incluir a los profesionales sociosanitarios en los mismos protocolos anti-Covid que las residencias de mayores. No puede ser que los mayores que residen en viviendas tuteladas, la mayoría en zonas rurales, queden relegados en el turno de vacunación.

Unidas Podemos Izquierda Unida considera que la Consejería de Sanidad comete un grave error si discrimina a los mayores de las viviendas tuteladas, repartidas la mayoría en pueblos pequeños, y a las trabajadoras y trabajadores que se ocupan de asistirles. Además, esta situación supone un nuevo “desprecio” por la España vaciada de la que tanto dicen preocuparse desde el Gobierno regional.

Quienes asisten a los mayores de las viviendas tuteladas y el personal del servicio de ayuda a domicilio, que en el caso de la Diputación de Albacete incluye alrededor de 600 auxiliares que atienden las necesidades de unas 2000 usuarios y usuarias en la provincia, son trabajadoras y trabajadores imprescindibles para las personas  mayores repartidas por toda la provincia, y un sector vulnerable por la elevada interacción que tienen con los usuarios, con los que por las propias necesidades del  trabajo.

Por último, Unidas Podemos Izquierda Unida se suma a la iniciativa de Izquierda Unida Castilla-La Mancha que va a llevar a todos los ayuntamientos donde cuente con presencia una iniciativa para pedir que se vacune al personal del SAD. Personal que no está incluido dentro del protocolo de vacunación a pesar de atender, en primera línea, a personas mayores que, en su conjunto, constituyen uno de los colectivos más vulnerables ante la Covid-19.