Solicitan la declaración de BIC para el Castillo de Ciruela

La Asociación de Vecinos y Vecinas Aldea de Ciruela ha presentado oficialmente, tanto al Ayuntamiento de Ciudad Real como a la Viceconsejería de Cultura, sendas solicitudes para que se inicien los trámites necesarios para declarar el Castillo de Ciruela, su aldea y su entorno, como Bien de Interés Cultural (BIC).

Según ha informado la Asociación en un comunicado, el 20 de febrero de 1293, el Rey Alfonso X El Sabio fundó la población de Villa Real, dando a sus moradores las aldeas de Ciruela, Villar del Pozo, Figueruela, Poblet y Alcalá, es decir que Ciruela forma parte del origen de Ciudad Real.

El Castillo de Ciruela, y su aldea, forman parte del alfoz de Alarcos. El Castillo es intrínsecamente un bien de interés cultural, según el decreto de 22 de abril de 1949 sobre Protección de los Castillos Españoles y que recoge que todos los Castillos de España tienen por naturaleza propia esta figura de protección.

Por otro lado, está inventariado como yacimiento, y de ello existen numerosos expedientes, como el de 1997, publicado en el BOP el 4 de Junio, en los que se realiza alusión de hallazgos en el Camino de Ciruela y en el Yacimiento de Ciruela.

No obstante, según la Asociación, estos restos están en un estado de "desprotección total, además de ser los grandes desconocidos por parte de la ciudad; llegándose a situaciones dolorosas, como la reciente expoliación de una pieza de un molino romano, de la que la asociación dio pública información, además de poner el hecho en conocimiento, tanto del ayuntamiento como de la Policía Nacional".

Desde la Asociación de Vecinos y Vecinas Aldea de Ciruela, como colectivo con personalidad jurídica propia, hemos valorado los informes técnicos cualificados que catalogan la aldea como lugar de interés histórico, arqueológico y geológico.

Por tener su ubicación en el término municipal de Ciudad Real, y siguiendo la normativa estatal y autonómica, el colectivo quiere que se abra el expediente para conseguir la declaración de Bien de Interés Cultural, y su consiguiente inclusión en el Catálogo de BIC de la Junta de Comunidades, para que se adopten las medidas oportunas tendentes a evitar su deterioro, pérdida o destrucción, actuando ante cualquier amenaza, daño o perturbación de su función social que tales bienes sufran, así como las dificultades y necesidades que tengan para el cuidado de estos bienes.