Castilla-La Mancha, más cerca de La Palma

Hay cosas que se ven lejanas sin pensar que el presente se ha hecho a fuerza de pasar el tiempo de ayer.

Hoy que todos los ojos miran a la isla de La Palma, se nos olvida que el Campo de Calatrava (Ciudad Real) fue escenario de innumerables erupciones volcánicas, tanto que siguen presentes los restos de al menos 300 de ellos en su inmensa mayoría ya extintos, que llevan a los habitantes de este espacio a sentirse cerca de los vecinos de La Palma en los últimos días.

El Instituto Volcanológico de Canarias (INVOLCAN) organiza cada año “La Noche Europea de los Volcanes” en la que participan 16 localidades de Europa, de ellas dos pertenecen a la provincia de Ciudad Real y son, Calzada de Calatrava y Aldea del Rey. En ambas existen las huellas de lo que en el pasado fue esta tierra forjada bajo el fuego de los volcanes. 

En el evento han participado entre el 24 de septiembre y el 3 de octubre localidades de Francia, Portugal, Italia, Hungría, Alemania, Suiza y Reino Unido y en España se ha elegido la zona volcánica de Campo de Calatrava, ya que es una de las plataformas volcánicas recientes más importantes de la península.

En nuestra tierra las actividades han sido organizadas por el Grupo de Investigación Geomorfología del Territorio y Paisajes en Regiones Volcánicas (GEOVOL) de la Universidad de Castilla-La Mancha, en colaboración con los Ayuntamientos de Aldea del Rey y de Calzada de Calatrava, . Ambas localidades, dedican parte de sus actividades turísticas a los volcanes y han aprovechado la ocasión para poner de manifiesto su interés por los nuevos descubrimientos en la materia, al tiempo que han visto elevar sustancialmente el número de visitantes en su espacio natural dada la curiosidad, tras el rugido del Cumbre Vieja en la isla de La Palma.

Hoy sobrecoge paisaje canario con nuevos cráteres, fisuras y ríos de lava que van borrando de un plumazo un paisaje que hasta ayer era verde, tornándolo en el color negro de la tristeza. La isla se viste de luto con la pérdida de tanta vida, aunque mantiene las fuerzas gracias precisamente a estos investigadores y estudiosos de los volcanes que han evitado la pérdida de vidas humanas.

Hombres y mujeres que estudian el comportamiento extraordinario de los volcanes, aunque a muchos de ellos seguramente se les vaya la vida sin haber visto la lava de cerca, en movimiento e incandescente.

Volcanes como el Teide (Tenerife) que expulsó lava por última vez en 1798. Más insistente fue el Timanfaya en Lanzarote, que entró en erupción el 1 de septiembre de 1730 y estuvo expulsando lava durante 6 años, para repetir la “gesta” en 1824, aunque más corta. En la isla de La Palma el San Juan en 1949 y El Teneguía de octubre a noviembre de 1971, ambos muy cerca del Cumbre Vieja, lo que hace pensar a algunos expertos que podría volver a expulsar lava en estos días.

Estos días ha hecho sentir a los vecinos de estas tierras, más cerca que nunca de los vecinos canarios de la isla de La Palma. 

P. Moratilla