El Gobierno de CLM estudia cómo abordar la mejora de la atención sociosanitaria

El Gobierno de Castilla-La Mancha estudia cómo abordar su "asignatura pendiente" de mejorar la atención sociosanitaria, a fin de que sea el modelo el que se adapte a las personas y no las personas al modelo. Consciente de que no se puede "estancar en políticas de hace 20 años", se propone trabajar y compartir experiencias con otras comunidades para llegar a la "excelencia".

Así lo han verbalizado el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, y la consejera de Bienestar Social, Bárbara García Torijano, que este miércoles han participado en Toledo en la jornada 'Lo sociosanitario: de los casos reales al modelo', que promueve la Fundación Economía y Salud de la mano de ambas consejerías.

En este marco, el titular regional de Sanidad ha reconocido que la Administración regional tiene que trabajar para llegar a una mejor sostenibilidad del sistema sanitario y, sobre todo, mejorar la atención a las personas. "Estamos queriendo cambiar la versión de la atención que pone en el centro al paciente por una versión que ponga en el centro a la persona. Ese es el gran cambio que nos toca hacer".

Dicho esto, ha asegurado que la herramienta que el Ejecutivo regional tiene para abordar este salto es el Plan de Salud, que congrega nueve planes, dos de ellos directamente relacionados con lo que ocurre en el entorno sociosanitario, como es el Plan de Humanización y el Plan Sociosanitario.

"Esta jornada nos pone en la pista del trabajo a realizar en los siguientes meses para acercar la asistencia sanitaria al entorno social. Hablamos de las personas más vulnerables y de que la esperanza de vida en España nos ha llevado a tener que tratar este asunto de forma diferente a como lo veníamos haciendo. Somos los segundos después de Japón y quizá los primeros dentro de 20 años, y esto obliga a trabajar con las personas más frágiles", ha reconocido.

Tras asegurar que el sistema sanitario regional es "asistencialmente muy bueno" y que, por ello, hay que exigir que sea "excelente", ha añadido que en esa mejora hay que ahondar en la prevención, en la mejora de los cuidados, en potenciar los autocuidados y en ofrecer una atención centrada en las personas.

ACTUALIZAR POLÍTICAS

En términos parecidos se ha manifestado la titular regional de Bienestar Social, que también ha reconocido la necesidad de trabajar desde todas las áreas del Gobierno que atienden a las necesidades de las personas para que sea el modelo el que se adapte a ellas y no ellas al modelo.

"No nos podemos estancar en las políticas de hace 20 años. Tenemos que reflexionar, hablar, trabajar, compartir experiencias con otras comunidades y evolucionar a un futuro en que las atenciones vayan encajadas en un modelo fabricado a la demanda de las evoluciones de la sociedad".

CAMBIAR EL MODELO Y DESTINAR MÁS RECURSOS

De su lado, el presidente de la Fundación Economía y Salud, Alberto Jiménez, ha explicado que el objetivo de la jornada, en la que se van a dar cita cerca de 40 expertos, es clarificar la interpretación del término 'sociosanitario' para, una vez conocidas las conclusiones de Castilla-La Mancha, elevarlas en el mes de febrero al Senado en un documento oficial.

Este proceso, ha detallado Jiménez, pasa por fijar el perfil de las personas que necesitan atención social y sanitaria y establecer protocolos de coordinación entre las dos administraciones, a fin de que puedan satisfacer simultánea y sinérgicamente a las personas que lo precisan, ajustando siempre los recursos necesarios.

Y es que el presidente de la Fundación Economía y Salud ha indicado que en España puede haber entre 1,5 y 2 millones de personas que precisen de atención sociosanitaria, más de 100.000 en el caso de Castilla-La Mancha, tratándose sobre todo de personas mayores que tienen problemas sanitarios continuados y falta de ayuda familiar.

Para atender a este gran colectivo Alberto Jiménez considera que es preciso reestructurar el modelo y aumentar el presupuesto. "Lo importante es que estas dos administraciones convivan de manera coordinada, pues mientras en la sanitaria la prestación es inmediata, en la social depende de un trámite administrativo que dura meses. Es en ese momento cuando se produce un desfase".