La Era de las Mentiras

Hace ya veinte años José María Aznar inició en España la Era de las Mentiras. Casi doscientas personas habían muerto el 11M en un atentado y el gobierno del Partido Popular mantuvo durante meses la autoría de ETA. El motivo era evidente: si los que habían puesto las bombas eran yihadistas, como luego se demostró, Aznar podría sentirse responsable por haber apoyado con otra gran mentira la Guerra de Irak un año antes. Aseguró que en Irak existían armas de destrucción masiva y ese fue el argumento para que Estados Unidos y una serie de aliados decidieran iniciar la intervención. Con el tiempo se demostró que ETA no había sido autor del atentado y que en Irak no había armas de destrucción masiva como había asegurado Aznar con la absoluta desfachatez y contundencia que le caracteriza. Tony Blair, por entonces primer ministro del Reino Unido, también había liderado las reuniones para incitar a aquella guerra y finalmente pidió perdón cuando se supo que todo era una pantomima para justificar una guerra y una matanza. Aznar se limitó a decir que él no era adivino. El presidente de Estados Unidos concedió una entrevista en exclusiva a TVE para dar las condolencias a España en la que daba a enterder que el 11M había sido obra de los yihadistas. Desde el gobierno de Aznar se prohibió la emisión de esa entrevista de Bush con la primera dama.

Desde entonces, llevamos veinte años de mentiras en los que ha aflorado la corrupción sistémica del Partido Popular reconocida por una sentencia de la Audiencia Nacional y que generó la moción de censura contra Mariano Rajoy. A partir de ese momento, Aznar sigue con las riendas del PP y decide iniciar la Era de la destrucción masiva de la política, de su propio partido de centroderecha y del PSOE manchando una tras otra la imagen de sus líderes. 

La Era de la Mentira va a acompañada del frentismo permanente, de la falta de diálogo, de intentar demostrar que todo va muy mal en España y que la única forma de resolverlo es que Aznar y los suyos, ahora Feijóo y Ayuso, recuperen el poder.

Hay líderes que marcaron una época y que harían un gran favor a España si se quitaran de una vez de en medio. En su huída hacia adelante y con su ira permanente, ya han hecho demasiado daño, ya han radicalizado a su partido y han creado una brecha de confianza de los ciudadanos en la política y en los políticos.

Ya es hora de que, veinte años después, llegue la Era de la Verdad, de la colaboración y de un pensamiento único: mejorar la vida de los españoles.

elObservadorDCLM