"Vais a tener que cerrar, os vamos a triturar. Idiotas"

“Vais a tener que cerrar, os vamos a triturar. Idiotas”. Es uno de los whatsApp enviados por Miguel Ángel Rodríguez (MAR) jefe de Gabinete de Isabel Díaz Ayuso, a una periodista de elDiario.es en relación con la publicación por este medio de la exclusiva sobre el fraude fiscal de la pareja de la presidenta de Madrid y las comisiones millonarias que cobró. A quien conoce la trayectoria de MAR no le extrañan este tipo de amenazas que ya profirió cuando era secretario de Estado de Comunicación del gobierno de Aznar y que, según él mismo ha matizado, más que una amenaza se trata de “un anuncio”, dando a enter que elDiario.es tiene los días contados por informar de algo que Rodríguez considera por otra parte irrelevante. En una información del diario digital se preguntan “¿Cómo no va a ser relevante que la presidenta de Madrid, la persona que gestiona el dinero de los impuestos, viva en una lujosa casa pagada por un defraudador que debe hasta las multas de su Maserati? ¿Qué diría la propia Ayuso, o el Partido Popular, si fuera cualquier político de izquierdas –bastaría un concejal de pueblo– quien estuviera en esta misma situación?”.

Ciertos comportamientos intolerables en una democracia como el matonismo verbal pueden darnos una idea sobre el semillero de dónde parte la permanente asfixia de crispación que vive la política española y sobre quiénes mandan de verdad en la derecha y la ultraderecha que son el mismo invento.

Alberto y Pablo deben estar secretamente encantados con el temita del novio de Ayuso. El gallego porque siempre ha estado pendiente de una llamada de MAR con el anuncio de su cierre y Casado porque fue defenestrado por el otro asunto del hermano de la reina Isabel. Vaya estres. Es lo que tiene ser presidentes de un partido en el que mandan otros  que se esconden casi en la sombra y que manifiestan una sospechosa necesidad de llegar al poder cuanto antes y como sea. Cuentan con mucha pasta para comprar muchos medios de comunicación y para tratar de hundir a otros que no publican lo que ellos disponen y que se atreven a informar sobre la punta del iceberg de un negocio que ellos llaman política. La incontinencia verbal de Rodríguez ha puesto de manifiesto que su prepotencia puede arruinar ese gran negocio con Ayuso como instrumento.

elObservadorDCLM