Esto se os va de las manos, chicos

Ignoro el motivo por el que la derecha española, PP y Vox, gozan de una especie de bulas, privilegios, dispensas o beneficios para hacer o decir lo que les plazca sin recibir por ello castigo alguno de la ciudadanía y, ni siquiera, cumplir la debida penitencia.

Lo más notable es que, además, con la viga en su propio ojo, exigen al PSOE y al resto de los partidos una virtud extrema que ellos mismos nunca demuestran, todo lo contrario: puede, por ejemplo, estar acreditada la corrupción del Partido Popular durante más de veinte años y que eso apenas les pase factura, incluso a la hora de poner en marcha maquinarias infames como la última contra la esposa del presidente Sánchez. 

Entre los muchos modelos de bulas o dispensas eclesiásticas de las que goza la derecha española está la de comer carne de cerdo, cordero o ganso en plena Cuaresma; los beneficios de luchar contra los infieles en sus particulares Santas Cruzadas; la bula de lacticinio, que les permite tener muy mala leche contra el adversario y clamar al cielo cuando osan responderles. Se trata en definitiva de contar con facilidades negadas a los demás para conseguir cosas u obtener dispensas difíciles o imposibles.

Pero, a lo que vamos. Cuando las tropelías de una banda quedan impunes durante mucho tiempo, en vez de dar gracias por las dispensas, tienden a perder la mesura y si antes trataban de actuar con cierta diplomacia política, con los años se han soltado y han perdido la educación, la sensibilidad y hasta la cordura.

Ya están a punto de que tanta dispensa social se les vaya de las manos con el asunto del juez criticado por media España que está poniendo en una difícil situación a la santa creencia de la imparcialidad de la justicia.

Es normal, que, en medio de tanta impunidad, aparezca un alcalde del PP, el de Camunas, en Toledo, y suelte públicamente barbaridades como estas: “Núnez Feijóo es un payaso, secundón; Felipe VI es un flojo dominado por una plebeya comunista; la Guardia Civil son mercenarios, saca multas y las dirigentes del popular tienen caras de muy golfas, viven de hacer mamadas furtivas”.

Llevamos años diciendo que no todo vale: ¿no creen que esta dedicación exclusiva al insulto se les puede ir de las manos en cualquier momento?

elObservatorioDCLM