El Ayuntamiento de Toledo aprobará su propio proyecto para canalizar aguas residuales y no verter al colector del Aserradero

La Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Toledo aprobará este miércoles su propio proyecto de canalización de aguas residuales, que incluye la ampliación de la red que discurre por el arroyo del Aserradero y que, por valor de 1,3 millones de euros, realizará la empresa Tagus concesionaria del servicio de suministro, instalando un colector desde la urbanización El Beato hasta la conexión con el colector de la avenida de Madrid.

Así lo han indicado en rueda de prensa el concejal de Urbanismo, Javier Nicolás, y el concejal de Gestión de los Servicios, Gabriel González, quienes han detallado que de esta forma el Consistorio resolverá los problemas de vertidos provocados por el mal funcionamiento del colector del Aserradero.

También se va a colocar una arqueta de bombeo para la recogida aguas fecales procedentes de El Beato y La Abadía, para su posterior impulsión al nuevo colector ubicado fuera del cauce del arroyo. Además, se contempla la ampliación de la tubería de agua potable para abastecer a la urbanización de El Beato mediante una conexión a la red existente en la zona del parque comercial.

El equipo de Gobierno "no va esperar más" para acometer esta obra, que tiene un plazo de ejecución de 6 meses, y ha lamentado que no se haya llegado a un acuerdo con los municipios de Bargas y Olías, que también vierten al colector del Aserradero, por lo que a partir de ahora quedarán en "una ilegalidad absoluta" si vierten sus aguas fecales y serán denunciados por el Ayuntamiento de la capital.

Nicolás ha admitido el Ayuntamiento de Bargas ha estado dispuesto a alcanzar una solución conjunto, aunque no así Olías y la Diputación de Toledo. No obstante, ha avanzado que los implicados tienen dos semanas -lo que tardará en comenzar la ejecución de obras del proyecto de Toledo- para decidir si quieren firman el convenio para poner en marcha el proyecto conjunto que había anteriormente.

Según ha detallado, la pasada semana se reunieron los técnicos de todas las administraciones implicadas para resolver los problemas que pudiera haber en el proyecto inicial y llegar a un acuerdo. Sin embargo, esta mañana, sólo había contestado el Ayuntamiento de Bargas, pero no el de Olías ni la Diputación.

"No veo el motivo por el que esto no puede hacerse. Querían tener el proyecto y lo tienen desde hace meses. A no ser que exista un mandato para que al Ayuntamiento de Toledo no le den ni agua no lo entiendo", ha comentado Javier Nicolás sobre el proyecto conjunto.

EDIFICIO ALHÓNDIGA

De otro lado, y preguntado sobre la situación del inmueble de La Alhóndiga, Nicolás ha apuntado que el Consistorio está "dispuesto a que haya un acuerdo" sobre su uso, aunque para ello debe haber una nueva concesión.

"Si antes era para oficinas y servicios y es para ese fin no hay problema pero si se tiene que cambiar el tipo de uso hay que hacer una nueva concesión administrativa", ha precisado el concejal de Urbanismo.