Caso Villa: discúlpense y dejen ya de hacer el ridículo

A estas alturas, no cabe ya otra postura razonable. Señores del PP de Castilla-La Mancha. Señora Riolobos, señora Cospedal, señora Claudia Alonso. Nacho Villa fue contratado por Cospedal para manipular la radio y la televisión pública, obviamente a favor de su gobierno y en contra de la oposición. Y lo hizo, todo el mundo sabe que lo hizo con insistencia, con malas maneras y con descaro. Durante cuatro largos años, día tras día, informativo tras informativo, programa tras programa. No hay más verdad que esa. A cambio, Villa recibió un sueldo elevado (120 mil euros al año) y dos tarjetas oro de las que hizo el uso que le pareció más oportuno: paradores, hoteles, restaurantes, cubatas, comidas, supermercados: más de 130 mil euros. Villa mantuvo durante seis meses una corresponsalía de la Televisión de Castilla-La Mancha en Hong Kong que les costaba 12.000 euros mensuales a los castellano-manchegos: ¿para qué quería la televisión regional una corresponsalía en Asia? Parece que solo la quería el propio Villa. La corresponsal era su amiga Ana Pérez, con la que hablaba por teléfono a menudo, en ocasiones hasta once veces en un solo día y en conversaciones que duraban hasta 40 minutos. Nacho habló con Asia en 300 ocasiones. Esas llamadas costaron cerca de 5.000 euros de dinero público. Luego Villa se trajo a Ana a Toledo, como adjunta del director de informativos y le pagó un sueldo de 75.000 euros al año. Ya se imaginan todos, señores del PP, la relación de cercanía que existía entre Villa y Pérez. Porque con la otra corresponsalía, en Bruselas, Villa solo habló en dos ocasiones. Es tan obvio y tan vergonzoso que solo puede convertirse en algo más grave si intentan esconder la mano que ha lanzado esta enorme piedra intentando desviar la atención hacia gestiones anteriores o hablar de "golferías" cuando ya todos sabemos en esta región quiénes han sido los golfos.

Nacho Villa vino de la Cope, igual que su amiga Ana. Allí, en la emisora de los Obispos, Villa pontificaba contra el matrimonio homosexual, impartía lecciones de ética y de dignidad. Son los peores, amigos del PP. Pidan disculpas y no hagan más el ridículo. La hipocresía tiene un límite, incluso en la vida política.

elObservadorDclm