García-Page, el trabajo por Castilla-La Mancha y las puestas en escena

En su único y obsesivo afán por lesionar la imagen del presidente del Gobierno, el Partido Popular y Podemos están dejando solo a Emiliano García-Page en la defensa de Castilla-La Mancha.

Desde el día de gracia en que Cospedal dejó de ser presidenta de nuestra tierra, el Partido Popular puso en marcha una estrategia política destructiva basada en frecuentes declaraciones de sus portavoces en las que solo cabe potenciar lo más negativo sobre la acción y la figura del presidente del Gobierno.

Se trata de un afán loable por su persistencia ya que requiere una ardua tarea previa hurgar en argumentos, buscar motivos debajo de las piedras para afear a Page, pero es también deplorable ya que resulta imposible mantener semejante reto a no ser que se prodiguen argumentos exagerados, infantiles o falsos, cosa que suele suceder y detectarse, ya demasiado a menudo por los ciudadanos. No es lógico que le exijan a Page lo que nunca hizo Cospedal; no es lógico que le exijan a Page lo que Cospedal deshizo; no es lógico que Page no acierte una sola vez, algo mínimamente digno de apoyo o de mención, cuando anuncia cada día una o dos iniciativas y se va comprobando su eficacia.

Pero es mucho menos racional que los diputados del PP de Castilla-La Mancha nunca expongan una sola iniciativa positiva a favor de nuestra tierra. Recuerdan demasiado los años de Cospedal en los que resultaba complicado responder a la pregunta: ¿dime tres cosas positivas que haya hecho Cospedal por Castilla-La Mancha? ¿Los recortes, el Tajo, el cementerio nuclear?

La oposición debe controlar la acción del gobierno, ese es el mandato de los ciudadanos y demostrar que ellos podrían hacerlo mejor, exponiendo errores y dando soluciones más inteligentes, demostrando que son más trabajadores e incluso apoyando al gobierno, sumando en vez de protestar por todo y elevar el tono de sus agrios discursos.

Tampoco Podemos ofrece precisamente una idea concreta de política creativa, se les llena la boca de argumentos a favor de iniciativas sociales, exigen en la misma línea al gobierno y a la hora de la verdad todo se diluye en una astucia de gestos, de cara a una galería cada vez más molesta con estériles puestas en escena. Los dos votos de Podemos son necesarios para que nuestra tierra siga avanzando y esa es la reflexión que debería guiarles en su importante tarea de apartar a políticos y políticas antisociales, elitistas, de derechas.

Por sus hechos los conoceremos y los juzgaremos.

elObservadorDCLM