Por Dios, por la patria y el Rey

Mal vamos en esta nuestra Comunidad cuando el máximo responsable de la educación al referirse a la "importancia de adaptarse a los nuevos tiempos", no alude, como cabría esperar, a novedosos contenidos curriculares ni a un renovado impulso en la utilización de las TICs en los centros educativos de CLM, sino a cambiar la foto del rey latente por la del rey patente.

Últimamente el Gobierno regional utiliza tanto el adjetivo "pionero" que casi me siento parte del colectivo de aquellos americanos que emigraron desde el Este al Oeste de Estados Unidos para colonizar nuevas tierras. El Diccionario de la Real Academia Española, ofrece dos posibles acepciones para "pionero": persona que inicia la exploración de nuevas tierras o persona que da los primeros pasos en una actividad humana. Nuestros gobernantes no tienen claro ni el significado ni la utilización correcta que debe hacerse de esta palabra ya que no paran de regalarnos usos erróneos, inconvenientes o tardíos de este término y su familia de sinónimos.

¿Quieren ejemplos? El 05-06-2014 con el titular "El Gobierno regional impulsa una red de imagen médica digital corporativa pionera y singular en Europa", pretendían vender como novedad la implantación del sistema YKONOS de imagen medica digital que llevaba funcionando en Castilla-La Mancha desde el año 2003.

El 30-06-2014 anunciaban que se iba a reconocer (como si de un descubrimiento o innovación se tratara) a todos los castellano-manchegos la libre elección de médico de familia, pediatra y enfermero, obviando que la Ley 14/1986, de 25 de abril, General de Sanidad, ya recogía este derecho en su artículo 10: "Todos tienen los siguientes derechos con respecto a las distintas administraciones públicas sanitarias: 13. A elegir el médico y los demás sanitarios titulados de acuerdo con las condiciones contempladas en esta Ley, en las disposiciones que se dicten para su desarrollo y en las que regulen el trabajo sanitario en los Centros de Salud".

¿Por qué les cuento esto? Es que pensando y pensando, he llegado a la conclusión de que la celeridad con la que han tramitado la solicitud de más de 1.900 cuadros del nuevo rey (el acto de proclamación de Felipe VI tuvo lugar el pasado 19 de junio, por lo que apenas han transcurridos tres semanas) para sustituirlos por los de su padre en los colegios de la región, se enmarca dentro de esa corriente "pionera" en la que nuestros gobernantes andan embarcados.

"Nuevo rey, nueva imagen", ha resaltado Marín. A la pregunta de si había alguna partida presupuestaria destinada a este fin, el Consejero se permitió bromear con los medios asegurando que la petición ya estaba realizada formalmente y que "de momento no nos han pedido dinero". Está bien lo de tener sentido del humor, pero conviene recordar que si bien el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas remitió, hace unas semanas, una circular a todos los Ayuntamientos de España instándoles a sustituir, en dependencias y despachos oficiales, las fotografías del rey Juan Carlos I por las de Felipe VI, nada se decía sobre quién iba a sufragar el coste de dicho cambio.

Lo recalco, como el sentido del humor es vital se me ocurre que, estableciendo una analogía con otro de los pioneros proyectos castellano-manchegos existentes, el denominado Mochila Digital, podríamos llamar a esta nueva iniciativa proyecto Morral Regio que prioriza, por encima de una buena formación de calidad, la realización de actuaciones destinadas a fijar la adhesión a la corona de los centros públicos educativos de CLM.
Un proyecto que busca favorecer la identificación de nuestros escolares con la imagen de Felipe VI a fin de garantizar su apoyo incondicional a la forma política del Estado español que fija la Constitución en su artículo 1.3: la Monarquía parlamentaria.

El proyecto Morral Regio, que se desarrollara en varias etapas, contempla la progresiva incorporación de otros símbolos que alimenten el cariño de los alumnos hacia el nuevo rey y su familia. En una primera fase se incluirá, en clase de música, el estudio de la partitura "Grand Dieu sauve le Roi", compuesta por Jean Baptiste Lully en honor Luis XIV, "El rey Sol", antepasado de nuestro actual monarca. A continuación se añadirá en las camisetas deportivas de nuestros escolares, junto al escudo de Castilla-La Mancha, la flor de lis, símbolo de la Casa Borbón.

De aquí a unos años, tal vez las nuevas generaciones de castellano-manchegos no sean las mejor preparadas en física, matemáticas o idiomas, pero seguro que nadie, nadie, podrá superarlas en protocolo real.

Teresa Suárez