RTVCM reproduce hasta los errores más garrafales de Labrador

Dicen en los pasillos de Radiotelevisión Castilla-La Mancha (RTVCM) que el delegado del Gobierno y candidato del PP a la Alcaldía de Toledo, Jesús Labrador, lleva ya contabilizados muchos más minutos en la escaleta que la propia presidenta regional, María Dolores Cospedal, en estas últimas semanas. No hay reunión, encuentro con simpatizantes y afiliados (aunque no se cuenten más de media docena en las imágenes), ronda de contactos o carrera popular donde participe Labrador que no estén detrás -y delante- las cámaras de la televisión autonómica (pagada por todos los contribuyentes -dicho sea de paso-, aunque no vayan a votarle).

Tan fuerte, tan absoluta es su presencia en cada noticiario que algunos han acuñado ya una expresión para definirlo: "El candidato ubicuo", en un calco o "intertextualidad", como decía Luis Racionero en tiempos, de la definición con que algunos críticos calificaron a un periodista canario, muy dado a las tertulias, columnas de opinión y entrevistas de toda índole, hace ya más de un lustro.

Pero lo cierto es que este afán por seguir a Jesús Labrador casi las 24 horas, non stop como dirían los anglófilos, a veces se torna en un bumerán que se vuelve en contra del candidato a regidor de la capital regional, porque la sobreexposición tanto al sol como a los medios, como es bien sabido (y su responsable de Comunicación, Pilar Labrador, profesional de CMT traída por Villa y ahora con una licencia, seguro que alguna vez lo habrá recordado) tiene efectos muy adversos.

No de otra forma puede entenderse que Castilla-La Mancha Televisión emitiera un total del candidato, donde decía que su propósito es que Toledo "forme parte muy esencialmente de esos 20 millones de empleos que vamos a generar en ésta y en la próxima legislatura". Sin duda, Labrador querría remedar a Mariano Rajoy que, en el inicio de esta semana, en Radio Nacional de España, dijo que el objetivo era llegar a los 20 millones de ocupados (aunque el presidente del Gobierno también tuvo un lapsus que corrigió en directo: dijo primero de "parados").

No faltan algunas voces en las redes sociales que aseguran que el candidato más seguido de la historia de la radiotelevisión autonómica, llamado a batir todas las marcas en número de apariciones y convocatorias cubiertas en un medio de comunicación de titularidad pública, acaso estaba rememorando aquellas otras palabras de Cospedal, en la campaña electoral, cuando afirmó que cada voto podría convertirse en un puesto de trabajo, una promesa que el tiempo se ha encargado de desmentir con una crudeza especialmente dolorosa. Pero ni aun así, ni siquiera si las papeletas del PP para las elecciones municipales y autonómicas de este mayo se presentaran "como si fueran un contrato de trabajo" (así lo dijo la entonces aspirante a la presidencia de la Junta), saldrían los cálculos hechos por Labrador desde un atril y recogidos tan textualmente por la cadena regional.

OTROS LAPSUS DESAFORTUNADOS

Lo cierto es que este fallo, yerro, desliz o gazapo de los 20 millones de empleos que se van a crear (Rajoy en su intervención en el Debate sobre el Estado de la Nación prometió tres millones, "ya sin sacrificios" y a muchos editorialistas les parecieron una boutade) no ha sido el único cometido por el candidato popular.

Muchos taxistas de la capital regional, cuando advierten que llevan como cliente a un periodista, no dejan de compartir otra promesa que sin duda les ha sorprendido y hasta molestado. Labrador aseguró que estos profesionales del transporte público necesitan una suerte de marquesina para protegerse del sol intenso en verano o de la lluvia ("actualmente los taxistas no tienen ni siquiera un banco para sentarse o una sombra para cobijarse").

"Para eso están nuestros propios coches, lo que hace falta es más trabajo y, por tanto, más consumo y más posibilidades de coger un taxi", comentaba esta misma mañana uno de ellos. Y otro había recalcado antes que lo que necesitan no son "sombrillas para estar con las manos en los bolsillos sino más viajeros y ya puestos a buscar remedios para el calor, el mejor sería que arreglaran el Tajo y pudiéramos darnos un chapuzón como se ve en algunas fotografías en blanco y negro cuando aún no había trasvases".

Otro objetivo de Labrador, al menos así lo afirmó en público, es construir un parque en La Vega Baja ("desde el arreglo de la Vega Baja, tanto en su zona deportiva como en una zona de parque; como el arreglo del aparcamiento, o la propuesta de hacer un centro comercial en la zona como piden los comerciantes"), un yacimiento arqueológico poco menos que abandonado por la Junta de Comunidades, gobernada por el Partido Popular. Tan insuficientes, tan escasas han sido las inversiones por parte del Gobierno regional en estos últimos años, que hasta el director general de Cultura, Javier Morales, en el mes de septiembre del año pasado, admitió que "no hay financiación".

La promesa de un parque también ha traído a la memoria de muchos toledanos las palabras del consejero de Educación, Cultura y Deportes, Marcial Marín, en julio de 2013, cuando aseguró que el Ejecutivo pretendía "mimar" la zona y convertirla en "un pulmón verde".

Casi dos años después, el único verdor en todo el yacimiento ha surgido espontáneamente por las lluvias primaverales.