Menos tiempos de respuesta para consultas, para pruebas diagnósticas y determinadas operaciones

En los dos primeros años y medio de la legislatura de Emiliano García-Page se han reducido los tiempos de respuesta para que los ciudadanos accedan a  una primera consulta, a una prueba diagnóstica y para determinadas intervenciones quirúrgicas.
 
Así lo ha asegurado en las Cortes regionales el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, tras publicarse este jueves las listas de espera del mes de noviembre, donde se recoge que hay 98.775 personas en espera de una intervención, una consulta o una prueba diagnóstica, muy lejos de las 179.634 del año 2012, el máximo récord negativo en la última década.
 
El responsable de Sanidad ha afirmado que si se comparan estos datos con los registrados en los dos primeros años y medio de la legislatura anterior, se observa que la lista de espera de consultas ha bajado un 46,7 por ciento, con 44.085 menos, y la de técnicas diagnósticas un 40,7 por ciento, con 6.065 pacientes menos. En cuanto a la lista de espera quirúrgica, ha bajado en un 13,3 por ciento, con 6.153 pacientes menos entre noviembre de 2013 y noviembre de este año.
 
Del mismo modo, Fernández Sanz ha explicado que “al referirnos a la lista de espera quirúrgica observamos que muchos procedimientos de alta importancia son resueltos en nuestros centros con mayor celeridad y, por tanto, con menor tiempo de espera”.
 
Así, ha explicado que en el caso de intervenciones quirúrgicas oncológicas, los pacientes esperan 15 días menos de media a ser operados, concretamente 35 en 2017 frente a los 51 de 2013. De igual manera, para cirugía cardíaca, los pacientes esperan 92 días menos para ser operados, pasando de los 151 días en 2013, a los 59 días actuales.
 
Igualmente, ha afirmado Fernández Sanz, “si analizamos las listas de espera de consultas y técnicas, la realidad es que nuestros pacientes esperan 36 días menos para una consulta que en 2013 (41 días en 2017 frente a 77 en 2013) y 41 días menos de media para una técnica diagnóstica (58 días en 2017 frente a 100 días en 2013).
 
El consejero de Sanidad ha informado que “desde el momento en que un paciente entra por la puerta del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha y debido a sus dolencias tiene que ser intervenido quirúrgicamente, el tiempo de espera de todo el proceso, que incluye consultas y técnicas diagnósticas, hasta la intervención quirúrgica, se está reduciendo significativamente”.
 
De este modo, ha explicado que “si consideramos en 950.000 el número de pacientes nuevos vistos en consulta, observamos que su tiempo de espera para consulta se ha reducido en 36 días en comparación cuando gobernaba el PP, del mismo modo que se han reducido en 41 los días  para ser sometido a una prueba diagnóstica”.
 
Otro dato fundamental que ha añadido Fernández Sanz, es que “al considerar el final del proceso como aquel en que el paciente es intervenido quirúrgicamente, observamos que solo un paciente de cada 13 termina en lista de espera quirúrgica”. Para ello, el trabajo en red entre hospitales de la Comunidad, “está siendo fundamental para aumentar la actividad de apoyo que nuestros centros hacen unos para otros” ha aseverado. En la actualidad y gracias a este sistema se ha intervenido a 1.519 pacientes, de los cuales 432 son en la provincia de Albacete.
 
Para concluir, Fernández Sanz ha insistido en que se están reduciendo las listas de espera, “y lo que es más importante, esta mejora progresiva no es puntual, sino que es parte de una dinámica de trabajo que nos hace seguir siendo optimistas para el futuro”.
 
Así, ha explicado que el SESCAM ha incrementado su actividad quirúrgica global por encima del tres por ciento en el primer semestre 2017 con respecto al mismo periodo del año anterior, con más de 1.600 intervenciones en comparación.
 
“Estamos en el camino correcto tras dos años y medio de trabajo intenso por recuperar nuestra Sanidad pública. Seguimos reduciendo las listas de espera de nuestro sistema de salud, y lo hacemos a partir de la mejora de la atención al paciente, el refuerzo y el blindaje de nuestro propio sistema público y el reconocimiento de la labor de nuestros profesionales”, ha concluido Fernández Sanz.