Ayudas sociales, de la vergüenza ajena al tamaño de una mentira

Escuchar a la diputada popular María Cortes Valentín en el Parlamento regional, es sacar automáticamente varias conclusiones además de sentir vergüenza ajena. Si de repente colocamos a una persona ajena a esta tierra, en uno de los escaños de las Cortes Regionales mientras ella habla, probablemente sacaría la conclusión de que esta diputada enarbola la bandera más "izquierdosa" de las políticas sociales, por su crítica feroz al Gobierno de García-Page. La segunda sería que no conoce de nada a la señora Cospedal. La tercera es que no ha vivido en esta tierra durante la legislatura del Partido Popular. 

Tras la jugada "tramposa" de pretender hablar de los vehículos sanitarios en el apartado de los Taxi, algo que el Grupo Parlamentario Popular hace con frecuencia, toma la palabra Cortes Valentín para enzarzarse en una locución de critica a los actuales servicios sociales en Castilla-La Mancha, algo que sorprende de forma notable ya que los actuales presupuestos recogen un notable incremento en las partidas. Entre otras cosas una aportación de 15.4 millones de euros para el Ingreso Mínimo de Solidaridad (IMS). Esa ayuda económica y periódica dedicada a las unidades familiares que carezcan de recursos económicos básicos y a la que Cospedal destinó 13.1 millones de euros entre 2011 y 2014. Es decir que para este año 2018  existe una asignación presupuestaria para el IMS que supera en 2.4 millones de euros lo que Cospedal se gastó en tres años.

Por otro lado y en relación con las Ayudas de Emergencia Social que son esas ayudas no periódicas y excepcionales destinadas a atender situaciones de urgente necesidad, previsiblemente irrepetibles y que no puedan ser atendidas por otros medios, la asignación presupuestaria para este año 2018 es de 6.5 millones de euros, prácticamente la misma cantidad que se gastó el Gobierno de Cospedal en el total para el mismo trienio (2011-2014).

Además silencia algo que ni siquiera existía bajo el Gobierno de Cospedal, el Plan contra la Pobreza energética, a través del cual se han concedido 15 mil ayudas hasta ahora, que han beneficiado a más de 50 mil personas.

¿Qué clase de moral se puede tener para criticar los servicios sociales actuales, cuando la ejecución de sus políticas estaban reducidas a una cuarta parte de estas tal como muestran los datos? ¿Quién que haya vivido en esta tierra la etapa más cruda de la crisis económica de este país puede olvidar la situación en la que se encontraban las familias? ¿A quién pretenden engañar? ¿Dónde estaba la diputada popular Cortes Valentín cuando gobernaba Cospedal, para que hubiera hecho esta exposición a su presidenta y le hubiera sacado los colores?

Esperamos que no se olvide la señora Valentín, en toda su larga exposición parlamentaria sobre las políticas sociales en Castilla-La Mancha, que "el tamaño de una mentira es muy fácil de medir y se consigue calculando el largo de su explicación, por el ancho de su excusa" porque  somos muchos castellano-manchegos los que esperamos esa explicación y esa excusa. 

Dclm.es