Y la Monarquía pa cuándo | Lola Castro

Lo último fue echar al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, con una moción de censura, por la sentencia que ponía negro sobre blanco la financiación irregular del Partido Popular, y este jueves nos enteramos de una más de nuestro emérito Rey Juan Carlos que se llevaba unos euros de Arabia Saudí y del AVE a la Meca para gastillos de la Casa.

Todo lo verbaliza aquella chica de melena rubia que acompañaba al monarca cuando no estaba Sofía. Corinna su Zayn-Wittgensteina se despacha a gusto con el comisario Villarejo en una conversación tranquila en la que explica cómo se desenvolvía el autor de “perdón, me he equivocado, no volverá a ocurrir” con la dictadura absolutista del país asiático.

No te perdonamos, te has equivocado y ha ocurrido muchas veces, el problema es de las que no nos enteramos. Pero de las que sabemos, y de los 80 millones de euros que te querías llevar en esta ocasión por mediación del omnipresente Villar Mir -fundador de OHL, alto cargo franquista, imputado en Lezo, presente en Papeles de Bárcenas- bien merece la censura de la Casa Real.

Ahora que ya se ha hecho saber a los políticos que la corrupción no son formas y que tiene consecuencias, es turno de encontrar los mecanismos para que el Jefe del Estado sea sometido al escrutinio del sentimiento de la calle, a la que ahora se le impide ni si quiera interpelarlo para conocer qué opina Felipe VI de su predecesor, de su padre. Nos remitirán una carta, y dos palabras en la cena de Nochebuena que querremos relacionar los periodistas con el viscoso fango en el que nada desde hace años la Monarquía Española, pero si la democracia puede acabar con un Gobierno de un partido corrupto, debemos cambiar la Constitución para que el pueblo pueda echar a una monarquía del todo oscura.

La diferencia entre los reyes de la Edad Media y los de ahora, es que los de entonces robaban en maravedíes y los de ahora en euros.

Lola Castro