La salida de tono de David Llorente

El diputado regional de Podemos, David Llorente, ha sacado de nuevo el tablero de ajedrez para jugar una nueva batalla. Tanto movimiento personal en los últimos meses, le obliga a tomar el pulso de los militantes de la formación morada para comprobar con cuantos apoyos cuenta después de la publicación de algunos titulares en los que se puso de manifiesto que su presencia produce alguna incomodidad en la militancia en su conjunto y con algunas mujeres en particular. 

Por esta razón y porque García Molina debe estar de vacaciones, sale de nuevo a la palestra a poner de manifiesto su duda sobre la continuidad de la formación morada en el Gobierno. Se hace extraño por otro lado que quien personalmente no está en el mismo haga esas aseveraciones que carecen de credibilidad, ya que ni es el representante del partido a nivel regional, ni tampoco forma parte de manera personal del Gobierno de García-Page. Ya en su momento fue palpable su discrepancia con quienes si están en el Gobierno regional, García Molina y María Díaz, y lo hizo desde el minuto uno en el que se tomó esta decisión. 

Ahora, aprovechando que los políticos están de vacaciones y dentro de sus "sueños de liderazgo" hace un ejercicio de personalismo manifiesto, poniendo en un brete a sus compañeros que quizá ni siquiera han tenido conocimiento previo a la hora de realizarlas. Es lo que tiene el debate previo, sobre todo cuando alguien habla en nombre de una colectividad, en cuyo caso se hace indispensable apoyar las manifestaciones en otras personas que signifiquen un número considerable dentro del grupo o bien ostenten la representación de las mismas. Parece que las manifestaciones de Llorente no se apoyan en ninguno de los dos elementos imprescindibles. 

Ya sabemos que en política la bicefalia puede ser complicada, pero es que en el caso de Podemos Castilla-La Mancha, no son dos cabezas visibles, sino que por momentos llegan a ser tres y eso lo complica todo mucho más, porque ya no sería bicefalia sino que estaríamos hablando de un cancerbero.

De todas formas, las partidas de ajedrez solo se pueden jugar con dos jugadores.

Dclm.es