Tu lo que quieres es que me coma el tigre

Se va Cospedal de Castilla-La Mancha y se aparta Vicente Tirado. Parece que el PP lo que quiere es que le "coma el tigre" recordando la historia tantas veces contada de los dos amigos, donde uno de dice al otro: 

_ "...y si al salir de casa te encuentras un tigre ¿qué harías?

 _ Pues es evidente, me volvería a meter dentro

 _ ¿Pero y si se te cierra la puerta?

 _ Pues me subiría a una ventana

 _ ¿Y si no hay ventana?

 _ Me metería en el coche 

 _ Y si no tienes las llaves del coche....

Así podríamos seguir hasta el infinito y más allá hasta que la capacidad de aguante del preguntado le obligase a decir aquello de "Tu lo que quieres es que me coma el tigre". Frase que deberían pronunciar los militantes del Partido Popular, quienes tenían hasta las primarias nacionales una candidata firme y decidida que era María Dolores de Cospedal. Cuando la seguridad empezó a flaquear y las pisadas de la líder en la tierra fueron disminuyendo considerablemente, el PP de Castilla-La Mancha fue agudizando su mirada y fijando la diana en la cara bonachona de Vicente Tirado. El problema es que los posibles candidatos del PP se esconden bajo las piedras ante el pavor de tenerse que enfrentar al candidato indiscutible del Partido Socialista, a su gestión impecable aunque vapuleada por la derecha y al despegue evidente de la región en los últimos cuatro años, que ha sabido sacar la sonrisa a los ciudadanos que estaban cansados de tantos recortes.  

Cospedal se va, Tirado también y parece que lo que quieren es que les "coma el tigre". Los afiliados del PP podrían encontrarse con Guarinos, Robisco, Núñez o Román...Intentan confundirnos con Rosa Romero porque no es viable que abandone su puesto en la mesa del Congreso de los Diputados, con un magnífico sueldo y con las malas consecuencias que ello podría traer al PP. Francisco Núñez amenaza con presentar su candidatura a la presidencia del PP y seguro que con éxito porque sabe vender alzando la voz y acelerando las sílabas, hasta el punto de que quien le escuche hablar sin entender el lenguaje, podría pensar que se trata de uno de aquellos buhoneros que llenaban las calles del oeste vendiendo pócimas mágicas en los tiempos del western.  

Ahora, como en los mejores culebrones latinoamericanos, los ciudadanos de la región nos preparamos las palomitas, buscamos una posición cómoda y esperamos ver capítulo a capítulo como termina esta película, que bien podría titularse "que te come el tigre". 

elObservadorDCLM