¿De verdad, Casado, que Cospedal fue la mejor presidenta que tuvo Castilla-La Mancha?

Del PP de Rajoy ya no queda ni la sombra, aunque sus bases aún no saben si han salido de Málaga para meterse en Malagón. Los afiliados  creyeron en las palabras de Casado cuando explicaba que su compromiso era con la ejemplaridad, la transparencia y la rendición de cuentas. Luego vino el máster, después la debacle electoral de las generales y ahora tendrá que explicar si ponen a la venta la sede de la calle Génova, porque la financiación del partido ya no es la que era, ni su número de afiliados tampoco, sobre todo los que cotizan de su bolsillo.

Las contradicciones del PP son cada vez más evidentes y menos lógicas. No solo Cospedal prometió en su campaña " no recortar" y ya sabemos que dejó esta región sumida en la más terrible de las miserias. También Núñez decía que los camiones del ATC no pasarían por Almansa (Albacete), lugar del que era alcalde, aunque ahora que es candidato a la presidencia de la Junta es lo mejor que le puede pasar a Villar de Cañas (Cuenca). Todos recordamos a Núñez apoyando a la sanidad privada, aunque días después fuera rectificado por su secretaria general, Carolina Agudo. No se queda atrás Pablo Casado, que quería a Cospedal lejos de Congreso después del caso Villarejo, de hecho forzó su salida en un corto espacio de tiempo. Incluso hay quien cuenta que fue vetada su presencia en un acto de partido celebrado en Albacete, para no tener que fotografiarse junto a ella. Lo sorprendente fue que el líder popular en un acto precisamente en Almansa y acompañado de Francisco Núñez afirmara que "El Gobierno de Cospedal ha sido el mejor que ha tenido nunca Castilla-La Mancha" e incluso añadió que "Se echa de menos su mandato". Es evidente que Casado no conoce esta tierra ni a sus gentes, que están sufriendo las consecuencias de ese "maravilloso" gobierno de Cospedal y han tenido que pagar 254 millones de euros en indemnizaciones por sentencias judiciales propiciadas por la nefasta gestión del Partido Popular al frente del Gobierno de Castilla-La Mancha. Sin duda "la mejor" presidenta para Castilla-La Mancha pero para el Partido Popular. El silencio de Núñez durante la campaña, tal vez transmite un poco de “vergüenza ajena” por estas palabras, eso es algo que no sabremos, mientras no se pronuncie sobre lo que opina de su “madrina”.

Lo cierto es que durante esta legislatura el Gobierno socialista se ha visto obligado a pagar, por culpa de Cospedal, 254 millones de euros repartidos en indemnizaciones por juicios perdidos en las modificaciones laborales de los funcionarios. Por la suspensión de obras de centros médicos y de colegios. Por el despido de cientos de interinos. Por la suspensión de las obras de los hospitales de Albacete, Toledo, Cuenca y Guadalajara. En total 137.2 millones de euros en sentencias sobre temas de personal y 116.7 millones de compensaciones económicas por obras interrumpidas. Todo ello sin contar con más de 13 millones de euros de facturas impagadas correspondientes al anterior contrato de oxigenoterapia en la región. 

Claro que el candidato Francisco Núñez, salió al encuentro de su presidente afirmando que "El PP siempre ha dicho que aquellos que han sido de la formación son útiles porque aquí no sobra nadie y cogemos todos". Tal vez alguien debería enseñarle a Núñez a conjugar el verbo "caber", más que nada, para que deje de conjugar el "coger".

La larga sombra de Cospedal sigue flotando, por tanto, sobre la campaña electoral, algo dentro de toda la lógica si tenemos en cuenta que la estrategia de García-Page en la región durante la última legislatura ha sido la de "hacer todo lo contrario a lo que hacía Cospedal". Los modelos son así, unas veces se toman como referencia de "lo que se debe hacer" y otras veces para todo lo contrario. El caso es que no le ha ido del todo mal al socialista a juzgar por los resultados de las encuestas. 

Lo incomprensible es que una política tan elogiada por el PP de Castilla-La Mancha, pase desapercibida en sus mítines o locuciones de campaña, como está ocurriendo. El caso es que la que fuera candidata a presidenta del PP-CLM, ha sido silenciada por todos sus compañeros excepto por el líder nacional, más lejano y menos informado de la realidad de su gestión. Toda una paradoja que saque su nombre precisamente quien le abrió la puerta para que saliera de la formación azul, obligando a María Dolores a entregar su acta de diputada tras haber sido ministra de Defensa, Secretaria General de su partido a nivel nacional y presidenta en Castilla-La Mancha, aunque claro está, después de hacerse públicas sus conversaciones con Villarejo, cuando Cospedal nos sobresaltaba todas las mañanas mientras dejaba día a día de sentirse respaldada por sus compañeros de partido. Circunstancias que le llevaron a decir: "Siempre he creído que un partido que no es capaz de defender a los suyos...no puede esperar que los ciudadanos confíen en él", que aunque parezca increíble son palabras pronunciadas por la propia Cospedal en aquellos días en los que los jarros de agua fría le caían a la ex-presidenta de Castilla-La Mancha con la percepción de la falta de apoyo de sus bases en las primarias.

Una situación que supo definir mejor que nadie su compañera de filas Celia Villalobos en "Espejo Público" "Hemos tenido un partido con dos mujeres matándose vivas para que un tío gane", y ese "tío" era precisamente Pablo Casado, hoy presidente del Partido Popular.

¿De verdad Cospedal ha sido la mejor presidenta de Castilla-La Mancha? porque lo que es seguro es que a excepción de Pablo Casado, en esta tierra, no la echa de menos nadie. 

DCLM