Page y Ferraz sellan la paz

El secretario regional del PSOE tratará de no utilizar palabras que puedan ser interpretadas como un ataque a Pedro Sánchez al que considera “líder indiscutible”. Page asegura que no existe “ninguna conspiración” contra Sánchez “todo lo contrario, cuenta con mi apoyo tanto como jefe del PSOE como del Ejecutivo central…Estamos contentos y no hay ningún problema. Simplemente se trata de adecuar el coro. Emiliano no calienta la banda, está en el banquillo del lado del presidente, solo que es un jugador de centro".

Page dice también “que no tiene ni quiere ninguna guerra orgánica con Sánchez. Es más, es conveniente que Sánchez diga pronto que repetirá como secretario general y que se presentará de nuevo a las siguientes generales”.

Page mantendrá sin embargo la “contundencia” en la defensa de la igualdad de Castilla-La Mancha y contra los separatistas. Confía en el compromiso de Ábalos de que no se va a negociar nada al margen de la Constitución y no deslizarse al plano político al que quieran llevar los separatistas al ejecutivo de coalición. Y añade que ya había defendido antes y después del 10-N una posición muy combativa contra el secesionismo, como le había "pedido" el presidente del Gobierno. Fuentes socialistas de la región añaden que la mejor lealtad con el partido es que "no cometa errores irreparables".

Por su parte, Ferraz se compromete a mantener un mayor diálogo con los líderes socialistas en las regiones.

UN ALMUERZO FRUCTÍFERO: MÁS ÉNFASIS EN LO QUE ESTÁN DE ACUERDO

DCLM ha confirmado con fuentes de la ejecutiva regional la noticia aparecida esta semana en El Confidencial que hace referencia a un almuerzo en el que participaron Emiliano García-Page y diputado nacional y el secretario de Organización del PSOE en la región, Sergio Gutiérrez y, por Ferraz, el responsable de Coordinación Territorial del PSOE, Santos Cerdán, y Julio Navalpotro, coordinador de la Secretaría de Organización. Se llagaba a este encuentro tras las duras declaraciones de Page: “Con el Código Penal no se mercadea”. 

El almuerzo se produjo después de que el secretario regional del PSOE realizara estas declaraciones que trascendieron pronto a los medios nacionales. El digital aseguraba que el almuerzo, previsto antes de fin de año aunque pospuesto por necesidades de agenda, se desarrolló “en un clima cordial y constructivo”. “Cerdán se quejó de las palabras de Page, de sus críticas duras contra el presidente. No hubo, con todo, "reproches". El barón castellanomanchego alegó que la sociología de su territorio, que gobierna con mayoría socialista, es muy peculiar, con mucho peso de las derechas. Un electorado muy conservador que, en las regionales, sin embargo, sí confían en el PSOE. De ahí que esté obligado a ser muy contundente, razonó".

El responsable de Coordinación Territorial del PSOE pidió moderación en el tono a Page para que sus palabras no puedan ser interpretadas como “un ataque” contra Sánchez. Cerdán pidió a Page que “pusiera más énfasis en aquello en lo que están de acuerdo y que pusiera el foco en los independentistas sin que se leyera como un golpe al Gobierno. Al final, Ferraz y Castilla-La Mancha pactaron una rebaja en el tono de Page y, a cambio, Cerdán se comprometió a un mayor "diálogo" y comunicación de la cúpula federal con los territorios. Los cuadros regionales se quejan de la falta de información de Sánchez, de que no comparte con ellos la estrategia, de que no se reúnen los órganos”. 

Page aseguró que comparte la política social de la coalición y las posibles asperezas entre CLM y Ferraz se han reconducido tras ese almuerzo que, según ambas partes, se consideró “fructífero”.

El Confidencial terminaba su crónica asegurando que “las relaciones entre el federal y Castilla-La Mancha ya eran "muy buenas", y la prueba es que no hubo problemas con las listas para las generales, a diferencia de lo que ocurrió con Andalucía. Así que la 'crisis' se cerró con un compromiso de mayor diálogo. Pero eso no disipa los temores de la dirección regional (y de otros cuadros) de que la actitud más dialogante con el independentismo puede pasar factura al PSOE en las urnas”.

LA DEFENSA DE LOS INTERESES DE CLM

En todo caso las fuentes de la ejecutiva regional aseguran que García-Page seguirá defendiendo ante todo los intereses de Castilla-La Mancha, con diálogo y con contundencia, en referencia a temas como el trasvase o la deuda con la comunidad y otros temas nacionales como el separatismo o la Constitución. Esa “moderación” en el tono no excluye que Page haga públicas posibles discrepancias, algo que siempre ha sucedido en el seno del PSOE. 

La rebaja en tono de las declaraciones de Page también tiene que ver con la utilización de sus palabras con los titulares más duros posibles en diversos medios de comunicación que, sin embargo, no recogen nunca otros sobre la sintonía con el gobierno de Pedro Sánchez y con su “indiscutible” liderazgo, con la idea de sembrar que existe un clima de enfrentamiento entre los barones y Sánchez, con el foco puesto en García-Page.

Hay que tener en cuenta que el gobierno de Page ha sido pionero en la defensa del edificio social en la región con medidas que ahora se llevan a cabo por el gobierno de coalición. Si Cospedal utilizó a Castilla-La Mancha como laboratorio de recortes y privatizaciones, Page ha abierto el camino en la defensa de la sanidad pública y los servicios sociales que tienen lugar prioritario en sus presupuestos.

DCLM