No sois buena gente

No. No sois buena gente. Será por creer en un dios que predica la bondad y la solidaridad mientras castiga a los inocentes al peor de los sufrimientos y premia con el cielo a quienes pecan en su nombre pero dicen arrepentirse de sus pecados. No. No sois buena gente. Sois una secta ultraconservadora y fascista que ni siquiera tiene la valentía de reconocer que lo es.

La buena gente tiene como prioridad a sus semejantes y contribuye con sus actos al beneficio general. Vosotros hacéis lo contrario: mentís, extendéis el odio al diferente, llamáis a la insubordinación antidemocrática y nunca estáis cuando la sociedad os necesita. Sois egoístas e insolidarios. Solo os importáis vosotros mismos y vuestros valores medievales. El resto no os importamos. Es más, somos prescindibles para vosotros.

La buena gente es la que salva vidas con su trabajo o respetando las medidas de confinamiento. Vosotros, que no sois buena gente, os saltáis el confinamiento para poner en riesgo la salud de otras personas. Porque vosotros, la mala gente, medra en el dolor y la tragedia ajena, y necesita víctimas sobre las que levantar bulos y proclamas desestabilizadoras.

La buena gente no miente ni difunde falsedades. Vosotros, que no sois buena gente, llegasteis a la política con mentiras y estáis instalados en el bulo y la calumnia. Mentís sobre el 8M sabiendo que los pacientes 0 eran hombres de negocios y turistas alemanes e italianos, que la visita de Ortega Smith a Milán y vuestro mitin de Vistalegre fueron focos de contagio, como lo fueron otros actos sociales públicos y privados organizados en los días previos y posteriores al 8M. Pero vuestra ideología es discriminatoria y tiene por enemigas a las mujeres y por eso, como vuestro dios culpó a Eva del pecado culpáis a la mujer. En realidad, sois conscientes de que el principal muro contra el fascismo lo está levantando el feminismo.

La buena gente no miente ni manipula la información. Vosotros manipuláis fotografías con ataúdes para crear dolor y desesperación en nuestra sociedad. Acusáis al Gobierno de prácticas antidemocráticas que solo le son propias al fascismo que representáis. Solo mentes enfermas como las vuestras llaman ‘campos de concentración’ a los centros voluntarios para enfermos asintomáticos. Solo mentes enfermas y antisociales crearían miles de cuentas falsas en las redes sociales para desinformar con bulos y mentiras.

La buena gente actua en política como la derecha portuguesa, deseando lo mejor al Gobierno del país y poniéndose a su servicio para combatir la pandemia. Vosotros, que no sois buena gente, negáis el apoyo al Gobierno, no atendéis las llamas telefónicas del Presidente y hacéis llamamientos a un golpe de Estado.

La OMS y otros organismos internacionales destacan la valentía de las decisiones adoptadas por el Gobierno y vemos día a día el resultado de esas medidas. Ya estamos en tasas de contagio de 1 = 0’8 y nuestras urgencias hospitalarias reciben solo un 20% de los pacientes que trataban hace dos semanas. Ya somos el país con más enfermos curados. Vosotros, a pesar de estos datos, creáis falsas asociaciones de víctimas del coronavirus, con reconocidas fascistas a su cabeza, para lucraros de ellas y judicializar la acción de Gobierno.

Los datos oficiales de los últimos días, a la mala gente como vosotros no les van bien porque no hay carroña con la que levantar bulos. Quizá por eso necesitáis de la existencia de nuevos focos de contagio y vulneráis las medidas de confinamiento poniendo en riesgo al personal del Congreso o clamáis irresponsablemente por el levantamiento de las actuales.

No. No sois buena gente. Nunca lo fuisteis. El fascismo es la peor de las desgracias conocidas por la humanidad y ahora lo habéis trufado, como dice el filosofo italiano Nuccio Ordine, con el más letal de los virus: el neoliberalismo.

Plumaroja