Unas elecciones y un cementerio nuclear

Si el PP vuelve a gobernar en Castilla-La Mancha y en España nos colocarán el cementerio nuclear en Villar de Cañas. Es uno de los ejemplos de la importancia de las próximas elecciones. 

Cospedal se empeñó en construir el ATC en Villar de Cañas, en Cuenca y el PP de la región continúa apoyando con firmeza esta descabellada propuesta que cuenta con informes técnicos desfavorables y la oposición de numerosos colectivos. Pablo Casado ha vuelto a situar como número uno por Cuenca al cunero Rafael Catalá quien aseguró al actual presidente de la región, Emiliano García-Page, que iba a ser su “mosca cojonera” hasta conseguir la construcción del silo en Cuenca. Fue cuando García-Page propuso la ampliación de la zona de protección de aves en la zona como una barrera más para evitar el presunto negocio que alguien quiso o quiere llevar a cabo a cambio de colocar en nuestra tierra una instalación nuclear con peligros potenciales que se extenderían a muchas generaciones. La ampliación de la cepa fue recurrida por el PP y ahora el Tribunal Superior de Justicia de la región ha decidido anularla. Por fortuna no era ese el único obstáculo de la Junta contra la creación del ATC en Cuenca ya que el Gobierno de Pedro Sánchez paralizó el proyecto y el regional echó atrás el Plan de Ordenación Municipal de Villar (POM) de Cañas que lo permitía. Si en Villar de Cañas sigue gobernando el PP volverán a redactar un nuevo POM que tendría que aprobar la Junta de Comunidades. Con tres gobiernos del PP, Villar de Cañas, Castilla-La Mancha y España nos tragaríamos el cementerio.

elObservadorDCLM