¿Cuanto nos queda por ver de las cloacas del PP?

Hoy hemos sabido que el director de la policía ofreció a Rafael Isea, ex ministro de finanzas de Hugo Chávez, identidad nueva, documentación y hasta una "nueva vida" en España para todas las personas que él designara, a cambio de una declaración sobre los pagos del régimen venezolano a Podemos.

La policía enviada hasta Nueva York, hace ese ofrecimiento a un venezolano que ha sido mano derecha del presidente de Venezuela, en un momento en el que está siendo perseguido por el régimen. Se encuentra sometido a mucha presión y preocupado por su familia que se encuentra aún en el país de origen. 

En la grabación, conseguida por Moncloa.com, se escucha con claridad que el enviado para conseguir la declaración, inspector jefe de policía, Fuentes Gago, tenía un mandato expreso del ministro del Interior, entonces Jorge Fernández Díaz y del presidente del Gobierno de España, en aquel momento Mariano Rajoy, sus palabras textuales son: “Yo he hablado con el ministro del Interior español y el ministro del Interior español habló con el presidente (del Gobierno) español. Yo solo tengo un mandato aquí, o sea, acompañar a estas personas y decirle a usted que me diga los nombres de las personas que quiere que documentemos en España y que le demos una nueva identidad o una nueva vida, la que tienen ustedes y les protejamos. Eso es mi compromiso. Yo vengo aquí con ese mandato. Usted me lo dice y lo hacemos”.. 

El encuentro se celebró el 12 de abril de 2016 en el Consulado de España en Nueva York y estaban presentes además del ex ministro de finanzas venezolano, Rafael Isea, su abogado Martín Rodil. El comisario José Manuel García Catalán, el jefe de la brigada de delincuencia económica y fiscal (UDEF), el inspector jefe Fuentes Gago y otra inspectora más de nombre Silvia. 

Todo lo que pedían a cambio de la nueva vida, era una declaración ante la policía, sobre un pago de 7 millones de euros, realizado por el Gobierno chavista a la fundación CEPS, origen de Podemos. 

Se da la circunstancia de que Fuentes Gago está imputado además en la "operación Kitchen", relacionada con las maniobras para robar a Bárcenas documentos comprometedores para el Partido Popular.

Todo esto ocurría, cuando este país aún estaba inmerso en una terrible crisis económica. El mismo día en que el Fondo Monetario Internacional  afirmaba que España necesitaba otro ajuste importante por el déficit. Mientras los españoles conocían el dato de que Camps, presidente de la Comunidad Valenciana, había ordenado firmar un aval ilegal para la Fórmula I, según había manifestado un testigo. Toda esta basura ocurría al mismo tiempo y el mismo día en que el Gobierno de Mariano Rajoy anunció que no iría a la sesión de control en el Congreso. 

Ahora, visto con la perspectiva del tiempo y con más datos de los que en ese momento teníamos, tenemos que preguntarnos ¿En manos de quien hemos estado? Para respondernos a nosotros mismos que en las manos de aquellos que se preocupaban mucho más de derribar electoralmente a sus rivales a costa del erario público, que de los que se suicidaban por los desahucios, hacían cola en las listas de espera sanitarias, o agotaban las prestaciones por desempleo. Y lo que es peor, mientras se daban de baja de la lista de la dependencia, aquellos mayores a los que les llegó antes el certificado de defunción. 

P. Moratilla